Adentrémonos a un tema que despierta un mar de opiniones, ideas y perspectivas, la legalización del porte de armas de fuego. Este tema desafía las bases de nuestra sociedad y nos pone a pensar sobre que significa realmente la libertad y como se equilibra la seguridad publica, pues ya sea legal o ilegal es uno de lo principales motivos de violencia.
Según investigaciones recientes de la (Amnistía Internacional)- el 44% de todos los homicidios cometidos en el mundo conlleva violencia armada. Entre 2012 y 2016, se produjeron 1.4 millones de muertes relacionanadas con armas de fuego y mas de 500 personas mueren diariamente por estas armas, así que con estas estadísticas es fácil darnos cuenta que las armas es una de las principales fuentes de muertes y hasta podrían ser causadas accidentalmente por las armas.
Pero, más allá de las vidas humanas ¿te has puesto a pensar cómo afectan ambientalmente? Si se fabrican y se venden cantidades escandalosas de armas y municiones de almenos 12,000 al año, suficiente para matar dos veces los habitantes de todo el mundo (Amnistía Internacional). Las municiones detonadas, armamento abandonado y minas, priva de comunidades enteras de recursos vitales como el agua, tierra cultivable, atención médica y educación. Nos deja como resultado desde muertes y mutilaciones hasta la imposibilidad de que las comunidades se recuperen de conflictos armados. Además, el impacto ambiental incluye, degradación del suelo, contaminación del agua, destrucción de especies, disminución de biodiversidad y desequilibrios en la cadena alimenticia.-(CICR) Lastimosamente este problema persistirá si la contaminación de
armas sigue.
Así que, la “legalización del porte de armas” no solo amenaza la seguridad de las personas y su tranquilidad, sino que también destruye nuestro entorno y debilita la estabilidad global. En un mundo que lucha por la paz y la sostenibilidad, debemos reconsiderar seriamente la idea de que “a mas armas equivalen a mas seguridad y protección” pues este deber no nos corresponde a nosotros sino a las autoridades. Es hora de desarmar para proteger, abrazando un camino hacia el futuro mas seguro y sostenible. El desarme no solo es una opción inteligente, sino una necesidad fundamental para la tranquilidad y bienestar de nuestro planeta, cómo también la paz de nuestras comunidades.
“Un mundo sin armas en manos de ciudadanos es un paso fundamental hacia laconstrucción de una sociedad mas segura y en armonía con nuestro entorno”
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